VIAJAR CON GUSTO
“Voy de camino al comedor, huelo la comida y se despierta mi expectación ¿qué habrá hoy de comer/cenar? ¿Será cocido? ¿Gazpacho? ¿Pisto? ¿Vieiras? Me paro, cierro los ojos y me imagino recorriendo las calles de Madrid, Jaén, Cáceres, La Coruña… “ Sabemos que el proceso de pensamiento de nuestros residentes no es éste, pero también sabemos que, al menos en algo, se parece y eso ya hace que el objetivo, el sentido de las Jornadas Gastronómicas de Las Mimosas se cumpla. El periodo estival suele ser un periodo que tenemos asociado a las vacaciones, a salir de casa, a cambiar de “sitio”. Nosotros pretendemos que nuestros residentes puedan hacerlo, a través del sentido del gusto. Recorrer la gastronomía típica de distintas provincias y ciudades españolas, no sólo implica un sentido pocas veces incluido en los ejercicios de estimulación, como es el sentido del gusto, sino que además, tiene el poder de transportarnos a otros lugares y a memorias y recuerdos de otras épocas de nuestra vida (la famosa reminiscencia) y nos ayuda a orientarnos hacia el momento del año en el que nos encontramos. Nos parece una forma más que satisfactoria de “marcar el verano” en el calendario del centro, de variar aún más el menú, incluso probando platos nuevos, poco habituales. De fomentar la motivación hacia algo que normalmente ya solo se hace por rutina a éstas edades: comer, y comer con gusto. Además, las Jornadas Gastronómicas sirven de hilo conductor para otras actividades que además de estimular y hacer trabajar tanto el cerebro como el cuerpo de la persona, suponen actividades agradables, positivas, que mejoran el estado de ánimo. Les traemos un trocito del folclore español con las músicas populares, les “llevamos” de tapeo por Andalucía con la feria de la tapa, les convertimos en chefs con el concurso de postres y les “transportamos” a las Fallas de Valencia con un ninot hecho por ellos mismos y unos graciosísimos cohetes sin humo (estos no asustan a nadie) Las Jornadas Gastronómicas de Las Mimosas son nuestro viaje de verano con todos nuestros residentes, con la colaboración y el esfuerzo de todo nuestro equipo de cocina y, como no podía ser de otra manera, con la excelente implicación del equipo de gerocultoras. ¿A qué gastronomías viajaremos el verano que viene?